Cuando entrenas algo se despierta dentro de ti. Esos momentos en que has planificado, has pensado en el entrenamiento y pones en práctica todo lo que has trabajado en un papel, es un momento especial. Empieza la sesión de entrenamiento. Pero en este papel no pones todo lo que te pueda pasar en esta sesión de trabajo. Alguna jugadora no puede venir, alguna otra no la ves con motivacion, otra se engancha a este carro de la abstención, y quizás alguna sufre alguna indisposición o lesión repentina. Y piensas...eso no es lo que tenía planificado. Así que te reinventas, modificas la sesión y dejas de hacer lo que tenías preparado. Cuando finalizas y te vas a casa, preguntas por la lesionada, por el motivo de no venir al entrenamiento, etc...No sirve de mucho. ya te suponías algunas respuestas, llevamos mucho en eso.
Esa sensación ya la has tenido en alguna ocasión, aunque lejana en la memoria, por suerte. Ese sentimiento de trabajar juntas, ese momento donde te encuentras y hablas de tus cosas, pero estás esperando entrenar para compartir esa pasión, esa ilusión que tiene su punto y seguido, en el partido del sábado. Esos momentos de vestuario, recordados para siempre, donde se ríe, se chilla, se enfada, y que es la cocina de un equipo...Todo eso se pierde. No se puede entender la importancia de un entrenamiento, sin todos esos ingredientes. Ver jugadoras que se ríen antes de salir a la cancha, pero que son capaces de enfadarse ante la ausencia de intensidad, de concentración, de pasión en definitiva, es lo que define la distancia entre un grupo y un equipo. La palabra clave,como siempre, es el compromiso, ese que te lleva al trabajo constante, a la búsqueda de la mejora, y sobretodo de sentir que realmente ese camino no tiene un fin, sino una compensación en ese trayecto, que decidiste iniciar.
A los entrenadores nos cuesta aún entrenar con negativas, nuestra tolerancia a la frustración es baja, y eso que siempre suele ser un síntoma de inmadurez, aquí se convierte en un motor de búsqueda, como "Google", para ver qué encontramos y recuperar nuestra felicidad perdida, ante ese panorama.
Pero solo encontramos "entradas" para superar el día, y esperar que el siguiente sea mejor.
No sé si nos espera este futuro a todos aquellos que amamos el baloncesto. Nos queda la esperanza de que los balones vuelvan a ser naranjas, que los vestuarios huelan otra vez a baloncesto, y que en ellos se cocinen esos grandes grupos, que nos han emocionado a lo largo de nuestras temporadas como entrenadores.
Pero algo hemos de hacer...las canchas se llenan de zapatillas de marca, los banquillos de bebidas isotonicas y los vestuarios "de perfumes" sin pasión.
Aun así seguimos "entrenando".
"Si dejas de aprender, dejas de enseñar" (Joan González)
2016/12/08
2016/10/27
ZONA EN FORMACIÓN
Entrenar un pre-infantil y un cadete de
primer año femenino, en Vedruna Palamós (Girona) está siendo un gran reto. Es
verdad que hacer tantos kilómetros significa un esfuerzo en todos los sentidos,
pero compensa la ilusión que tengo por entrenar a dos equipos con niveles
distintos, con objetivos desiguales, pero con un interés común, que es que
desarrollen sus máximas capacidades técnicas-tàcticas y desarrollen
paralelamente los distintos valores, que todos los entrenadores sabemos que se
dan, cuando se trabaja con un grupo.
Dicho esto, he de decir que no voy a
opinar de si el nivel es mas bajo o mas alto que en otras zonas. Cada
territorio tiene su realidad, sus características, y los que llevamos años en
esto, sabemos lo difícil que es lidiar con algunas creencias que por historia,
por rutina o por otras razones se puedan dar. Todos los que hacen baloncesto a
cualquier nivel merecen un respeto, solo por el hecho de querer enseñar y de
querer formar a las jugadoras.
Llama la atención que de los tres
partidos que llevo con el cadete de primer año femenino, he encontrado
las defensas zonales como los principales señas identificativos de la defensa
de esos equipos. Sorprende aún mas que estas zonas sean estáticas y que sólo
busquen preservar la zona para buscar el fallo en el tiro atacante del
contrario.
Me gustaría saber los motivos por los
que un entrenador enseña zona a niñas de 14 años, sino es el hecho de buscar el
resultado por encima de la formación de la jugadora. Si propusieran una “zona
press” toda la pista o media cancha, como mínimo vería alguna intención de que
la defensa quiere atacar, valga la redundancia, al ataque.
Y eso después se traslada al ataque
cuando ves con 14 años ataques con bloqueo directo, es decir una incongruencia
lleva a la otra.
Es verdad, no esta escrito que no se
pueda hacer zona, pero estaremos deacuerdo que si en el pre-infantil no
existiera la norma de prohibición de zona, estoy seguro que ya habría
encontrado equipos con esta disposición defensiva. Creo que trabajar por
ámbitos zonales no ayuda en nada a superar situaciones de responsabilidad del
1x1. del 2x2, etc...Trabajar en zona a esas edades confunde a las jugadoras que
tienen una imagen pasiva de lo que significa una defensa zonal (la mayoría hacen
2-3). Lo bueno de esto es que he visto equipos que trabajan 2-3 y tienen
preparadas salidas de contraataque establecidos con esta disposición táctica.
Lo que significa que se trabaja en los entrenamientos el ataque a través del
error del otro equipo que esta atacando y no por que tu defensa sea capaz de
ganar a los ofensivos mediante una
defensa individual agresiva, atrevida, etc...
He tenido suerte y aún asi con un
equipo que esta a un bajo nivel y que esta trabajando mucho para mejorar en
todos los sentidos, hemos ganado. Con eso quiero decir que tampoco se ha
cumplido el objetivo que tenian...Entonces que sentido tiene seguir jugando con
esa defensa?
Estoy seguro que la mayoría de veces
perderemos ante una situación así, sino conseguimos un rebote y salida rápida
para anticiparnos a la puesta en escena de esta zona. Mis jugadoras no
entienden que no trabajemos situaciones contra zona, por que ellas aun ven en
la victoria la respuesta simple de éxito. Y no las culpo. Es lógico que piensen
así, si se desprende de los entrenadores que ganar, aún haciendo zona, es lo
realmente importante.
Mi reflexión es: ¿Saben tus jugadoras
como han de defender un 1x1?. ¿Saben como tienen que utilizar las manos, las
piernas, que balanceo han de hacer para cambiar de orientación y ganar espacio
al atacante? Saben como han de defender con bote, sin bote, con espacios, sin
espacios, el corte, el rebote defensivo, etc...? Y así aumentado la dificultad.
Puedes ir a ganar con esa zona, irte a
casa y decir que buen entrenador soy, o puedes trabajar para mejorar y cuando
vayas a casa preguntarte individualmente y colectivamente que han interiorizado
tus jugadoras, mas allá de ver en el marcador, ese resultado que te hará mejor
o peor entrenador, para algunos, menos para los que verdaderamente aprecien tu
trabajo, que son los que importante...tus jugadoras!!!!
Ningún resultado pone a nadie en su
sitio en el baloncesto formativo. Tu eres mejor entrenador si tus jugadoras lo
hacen mejor cada dia.
2016/09/27
LOS CAMBIOS EN UN CLUB. ..LLEGA LA INSEGURIDAD
La zona de confort que con los años, se
establecen en los clubs, son un valor de seguridad, de comodidad, incluso de
equilibrio táctico y tácito entre algunos entrenadores. Pero impide la
evolución de un club y la búsqueda de la excelencia.
La formación especifica de
los entrenadores, es básico para remover la tierra y sembrar nuevos retos, y es
evidente que hay que tenerla, aunque ahora ya no es la única formación
disponible y necesaria. Estudiar situaciones de grupo, relaciones
interpersonales, composición de liderazgos, la gestión de un equipo, etc, es un
añadido básico en la formación.
El trabajo con equipos de
formación, técnica, táctica y relacional es imprescindible en la construcción y
historia de un club, si quiere una mejora constante de sus jugadores y
jugadoras. Pero claro... Quien primero tiene que tener y querer voluntad de
mejorar, deben ser los entrenadores.
Si en edades de formación
las jugadoras/es no tienen hábitos, no tienen técnica individual adecuada a su
edad, no saben “moverse” en los espacios, no saben nada de reglamento, etc, hay
una culpa proporcional con quienes han sido sus entrenadores. Mucha parte es
imputable a la falta de rigor, de metodología, y por que no de decirlo de
conocimientos.
Sigue habiendo una
corriente destructiva para la formación, que conduce a pensar que un jugador
puede ser buen entrenador. Es evidente que un jugador puede aportar una parte
de su conocimiento de jugador a su aprendizaje, pero de ninguna manera es
suficiente para pensar que pueda entrenar sin ningún tipo de formación adjunta.
Y ahí esta el error. Un error de muchos clubs que aún sabiendo que esto es
perjudicial apuestan por esta vertiente.
Pero incluso podemos
“perdonar” a los coordinadores o clubs por esta corriente errónea, por que es
posible que la necesidad supere la demanda. Lo que no es justificable, es que un entrenador no preste atención a
aquellos entrenadores que en su club le pueden aportar conocimiento, que no
sepa buscar en el exterior elementos que puedan aumentar sus competencias o que
no este atento a lecturas recomendables para mejorar este rendimiento.
A esto hay que sumar como
algunos dirigen sus entrenamientos altivos y prepotentes a las situaciones, sin
darse cuenta del enorme daño que hacen a sus jugadores y en consecuencia a la
formación de este club.
También los padres son
responsables de esta situación, por que han de exigir una calidad en la
formación. Pero claro, ahí nos topamos con otra situación: El enorme
desequilibrio entre ellos, con los objetivos de estos entrenamientos.
Los padres tienen que tener
claro que la formación que se les dará es de ba-lon-ces-to. Y ¿Porqué digo
esto?, por que el baloncesto engloba un trabajo metodológico de asumir unos
conceptos competenciales por la edad, de este deporte y que se entrelaza con el trabajo que representa los aspectos
relacionales: Trabajo de grupo. El equipo como punto de unión. Las diferencias
entre los jugadores y asumirlos por parte del grupo, la higiene como elemento
importante, la educación deportiva como motor del grupo de trabajo (el saludo
inicial, la puntualidad, el respeto, la concentración, etc...)
Eso significa que han de
tener claro que este espacio de una hora y media de entrenamiento se trabajan
todos estos elementos y que no puede haber intromisiones de ningún tipo. El
niño/a tiene que aprender a situarse en este espacio, superar situaciones de desventaja, asumir errores, saber mantener la concentración, etc...
Y ahí viene el título del artículo.
Cambiar todo esto, modificarlo, genera inseguridad,. Pero esta sensación, os
digo que no es negativa. Cuando hay cambio, se producen procesos que conducen
siempre a generar mayor entusiasmo y con ello la seguridad, de que mas allá de
los resultados durante el camino del cambio, hay verdaderos lazos que unen mas a
los que contribuyen a este cambio. Y sobretodo, genera magia cuando te das cuenta de que aún te queda tanto por
aprender
2016/09/13
EL SENTIMIENTO DEL BALONCESTO. LA TRANSMISIÓN
Una de mis últimas
reflexiones, es cómo puedo hacerlo para que este sentimiento que me genera el
baloncesto, lo pueda transmitir a mis jugadoras, y ellas, a su entorno.
“Sin emoción, no hay
aprendizaje posible” Y eso es precisamente lo que me gustaría contagiar. Si
claro, quieren jugar a baloncesto, les gusta el baloncesto, pero...¿Les genera
emoción?.
Es imposible la descripción de todas
las emociones, y evidentemente las hay positivas y negativas. Pero si les preguntase
a las jugadoras de formación que entreno en el Vedruna-Palamós, a la mayoría,
el baloncesto les genera felicidad, bienestar, satisfacción...Hacen una
actividad deportiva y lúdica, se ven con sus amigas, comparten un vestuario,
tienen vivencias de grupo importantes
para el desarrollo del proceso formativo... Hasta aquí, todos estaríamos bastante de acuerdo en que esto ocurre en casi la
totalidad de nuestros equipos. Y vamos a dejar de lado para otra
reflexión, los casos individuales donde
puedan generar emociones contrarias.
Pero la dificultad viene
cuando el baloncesto les exige un plus tanto a ellas como a su entorno familiar
y les obliga a salir de la zona de confort.
Para mi eso tiene que ver
con tener objetivos de mejora y ello significa implicación en el trabajo,
cambios de hábitos, modificación de la
metodología.
A mi este trabajo me
apasiona, me genera emociones positivas, como decía un entrenador amigo mío...”A
mi el baloncesto, me pone”. La dificultad es cuando tu quieres transmitir
eso, contagiarlo, y eso no llega por igual a todos. Cuando las
expectativas dentro del equipo también son diferentes. Te puedes encontrar
jugadoras que quieren desarrollar al máximo sus capacidades y quizás alguna
otra que su máximo objetivo es presencial. Aquí el entrenador va a tener
trabajo para transmitir eso al grupo y que este equipo adopte como conjunto,
una implicación máxima en el logro de objetivos.
Y ese trabajo que hay que
transmitir es:
-
Ilusión por trabajar en los entrenamientos.
-
Aumentar la capacidad de trabajo progresivamente
-
Normas de ejecución (Asistencia regular, puntualidad, actitudes,
vestimenta deportiva,
-
Que los padres tengan en cuenta que la asistencia al entrenamiento es
de importancia y que intenten establecer las otras actividades sociales,
familiares etc fuera del horario de trabajo de entrenamiento, siempre que sea
posible.
-
Que la mejora de la jugadora depende del entrenador y mucho mas de la
jugadora.
-
Crear y transmitir hábitos que ayuden a la concentración.
-
Minimizar las lesiones no invalidantes
Lo que si percibo en muchos
entrenadores es que la ilusión nos sobrepasa. Y lo hacemos hasta tal punto, que
somos capaces de poner en riesgo nuestro entorno por eso que sentimos, por lo
que yo llamo la pelota naranja.
Sólo espero que sepa
trasmitirles a las jugadoras toda esta experiencia vital interna, y que el
baloncesto les emocione. ESE ES MI OBJETIVO
2016/08/18
LOS ESCRITOS DE UN BLOG
Hace ochos años que empecé mi blog. La idea inicial era la de poder escribir muchas de las cosas que a lo largo de años de experiencia entrenando, había acumulado y tenía ganas de poder trasladarlas mediante un teclado. Así ha sido y así espero que siga hasta que tenga motivación para ello. Ahora hay muchos blogs dedicados al baloncesto algunos de ellos muy interesantes y los sigo habitualmente. De todas formas he de decir que no quiero caer en la idea que veo que caen otros de competir por escribir más. Escribo cuando me apetece, cuando mi tiempo me lo permite o cuando tengo un tema interesante que quiero expresar. Me da igual si me leen dos personas o doscientas, por qué mi objetivo es más personal que publico. Lo importante es llegar a quién tiene el deseo de leerte. Deseo poner en papel aquello que tengo en la cabeza.
Si alguien ha leído mis escritos hablo muy poco, casi nada de cosas tácticas o técnicas donde hay excelentes profesionales que saben mucho más que yo y a los que leo con sumo interés. Mi propuesta ha sido básicamente escribir sobre aspectos que rodean a nuestro o a mi baloncesto, o que creo que inciden sobre el de una forma relacional, psicológica etc..
Hace ocho o diez años casi nadie escribía en los blogs, de la importancia de los aspectos mentales en nuestro deporte. Muchos escribían sobre bloqueos, sistemas, etc, pero pocos muy pocos, lo hacían sobre cómo influyen los aspectos relacionales en el trabajo entre entrenador y jugador. Como de importante era ya entonces el trabajo de gestión del entrenador que tanto se habla ahora. Qué significaba vivir un “vestuario”
La relación con los árbitros, la gestión de la derrota, etc...
Si algunos escriben sobre esta línea, estoy encantado por qué es un tema que me apasiona y sigo con interés muchas opiniones y escritos.
He estudiado psicológica, educador social, “coaching” y me sigo formando en la línea de “Gestalt” como parte del trabajo interior que hago continuadamente para saber más de mí, aprovechar mis recursos personales al máximo, y corregir aspectos que me ayuden a superarme.
Por mucho que algunos amigos me insistan, no voy a caer en
competir por escribir más, por expresar más, por el “más”. Por qué he dicho muchas veces que por mi profesión de Educador Social, donde trabajó con la vulnerabilidad, empatizo con “el menos”, con los pocos, con los que tienen dificultades.
Me encanta leer de otros, pero también sería bueno que otros no se mirasen el ombligo continuadamente y supieran apreciar también los escritos de otros compañeros.
Un abrazo a todos los que escriben...os leo!!!
2016/06/28
EL SINDROME POST-TEMPORADA DEL ENTRENADOR
Cuando un entrenador acaba una
temporada, a pesar del cansancio acumulado tanto físicamente como
psicológicamente, le invade una sensación de vacío.
Ha estado nueve meses acostumbrado a
unas rutinas de trabajo, a unos horarios, pero sobretodo a lo que conlleva
trabajar con un grupo humano de jugadoras.
Esta sensación tiene mas síntomas que
se traducen en:
-
Idealización de todos los
momentos positivos.
Con el tiempo, muchas de las imágenes
que tu tienes retenidas en tu disco duro como satisfactorias, tienden a coger
mas relevancia y emergen potentes como parte de una etapa que disfrutaste y que
no volverá a suceder. Momentos de partidos importantes, de relaciones de grupo,
de conversaciones con jugadoras, momentos de alegría...Todo esto se entremezcla
y interfiere en tu análisis objetivo de la valoración de la temporada. Al
pensar en todas esas imágenes juntas, tu mente proyecta una película vivida
pero irreal. Es atemporal. Cruza todos los momentos “màgicos” y te hace
idealizar algunas situaciones.
-
Relativización de los momentos
negativos.
A esto se suma la capacidad que tenemos
algunas personas en difuminar realmente los momentos agrios, los momentos en
que hemos sufrido por diferentes motivos: En la gestión del vestuario, en
alguna fases de la temporada con los entrenamientos, En las relaciones con el
club o personas de este club. Por que
no hemos de olvidar que los clubs son dirigidos por persones y a veces
generalizamos y nombramos al club como parte de un problema cuando no es asi.
-
Sensación de perdida de amistades
realizadas en este periodo de trabajo
Cuando te vas de un club, no puedes
pasar por alto que has hecho unos lazos con distinta gente. Estas relaciones
que has ido tejiendo durante la temporada, que han sido intensas, de pronto
cuando dejas el club, se establecen como unas jerarquías: Unas se dejan ir,
otras tendrás una relación puntual, y con alguna otra seguramente formara parte
de tu circulo mas cercano de amistades. Es esa “mochila” virtual, fruto de
bagaje que se va llenando también de esas personas que te acompañan en tu viaje
vital.
-
Descolocación ante cambio de
rutina diaria y de fines de semana...
Entrenas a otro club. Cambian las
imágenes. Las instalaciones son nuevas, los
jugadores son distintos, tus referencias ya no son las mismas, es decir
cambian tus rutinas. Para algunos entrenadores en los que me incluyo, donde las
pautas y rutinas son importantes, encuentras a faltar incluso el café que te
tomabas antes de entrenar por ejemplo. Esta simple rutina, pero que has estado
haciendo todo el año, marca tu forma de desenvolverte. Por que formaba parte de
tu ritual diario.
Todas estas sensaciones son más o menos
duraderas en función de la personalidad de cada entrenador, en la adaptación a un nuevo grupo, equipo de trabajo y club si el cambio también conlleva a eso.
Estas sensaciones se acentúan con el
cambio de club, por que realmente dejas un aparte de tu trayectoria como
entrenador y además tu te llevas parte de esta historia contigo, por que te has
sentido como parte del proceso vital de la
entidad. Al final, con los años, tu habrás formado, en mayor o menor
medida, parte de este proceso deportivo de desarrollo del juego del baloncesto
en este club y con ello también siempre dejas una parte de ti.
Cuando empiezas a entrenar no tienes
tanto estas sensaciones, por que la mayoría de entrenadores, hacen los cambios
pensando mayoritariamente en una ascensión deportiva, en una mejora de
categoría, en buscar su proceso como entrenadores, y por que no decirlo, con la
ilusión de llegar a lo más alto como entrenador, aspecto que por otra parte, me
parece de lo mas lícito. Así pues los cambios responden mas a mejoras
profesionales.
En el caso de entrenadores que ya
llevamos muchos años entrenando, los cambios se producen mas desde la vertiente
emocional. Valoras aspectos menos tangibles, pero mas importantes. ¿Dónde te
sentirás mejor?. ¿Cómo será tu día a día?. ¿Que club vas a encontrar?, ¿Qué
organización vas a tener? ¿Cómo serán tus rutinas?.
Para mi lo más importante es el día a
día de entrenamientos. Lo que vives en ellos, el “antes” y el “después”. Todos
los entrenadores tienen algún síntoma post-temporada, por que todos los
entrenadores que conozco, sin excepción, dejan algo suyo en todos los equipos
que entrenan.
Ahora toca pensar en la otra imagen.
Vamos empezando...Coger el silbato, y entrar en cancha a buscar nuevos retos,
que te traerán nuevos recuerdos.
Vamos sumando...
2016/06/17
26 AÑOS DE SÉNIORS
Este año al llevar el cadete femenino del C.B Barna Bàsquet he disfrutado tanto, que mi reflexión ha sido que debia hacer un cambio en mi vida como entrenador.
Podria poner todas las fotos que tengo colgadas en la pared de mi casa, de todos los equipos donde he entrenado, pero pongo los dos últimos equipos donde he entrenado, uno masculino y otro femenino, como ejemplos de esa trayectória. Dos clubs extraordinarios por su história como son Grup Barna Bàsquet, mi primer equipo como jugador y un club con una gran história, la UEM, el club que llevó en el corazón donde he coincidido con grandes entrenadores y personas
Pero no quiero olvidarme de Sant Joan Maristas que fue mi primer equipo sénior, C.B Vilafranca, C.B.Montcada, en mi primera etapa EBA, C.B Ripollet donde tuve seguramente al mejor grupo humano y deportivo, C.B. Gavà, un club con una magnífica estructura, Alella, donde tanto disfrute del baloncesto, etc...
Un abrazo a todos ellos, y gracias por vuestra confianza. Me llevo muchos recuerdos y soretodo la gran cantidad de personas que he conocido atraves de este deporte y de grandes entrenadores SENIORS como: Angel Martin-Benito Pérez Miguel Angel Gomez Leon, Miguel Angel Ganella LopezRafael layola, Agustí Forner, Joaquin Arnal Lahoz, Joaquin Costa, Ricard Casas, Xavier Garcia Pujadas, Salva Maldonado Ruiz Ferran Peña Lucia Alberto Sobrin Cabero Alberto Peña Gómez Artur Soler Valentin Tubau, Jordi Vizcaino, Cesar Aneas Prades, Raul Bonet Vilanova Joan Martinez Escala Oscar Jorda Lozano Julio Jiménez Jiménez Juan Eduardo Piñero Vazquez Jesús Fernández Núñezy tantos y tantos otros que me han de perdonar que no ponga sus nombres no por olvido sinó por espacio
Dejo esta etapa de entrenador sénior entre lagrimas, por todo lo vivido emocionalmente. En global he tenido suerte con los resultados, pero mas aun con lo vivido con los jugadores, con los entrenadores y la gente que rodea el baloncesto.
Tengo especialmente un recuerdo imborrable de mi etapa como ayudante de Angel Martin Benito en Montcada y que gracias a él y a lo que aprendí, pude empezar a entrenar en EBA joven. Recuerdo los viajes en autocar, y todo lo vivido en esa epoca. Ahora con los años me siento orgulloso de haberte tenido como entrenador jefe y ahora como amigo. Gracias Angel por esa puerta que todos necesitamos algun dia que alguien nos abra y ver detrás de ella un mundo totalmente diferente.
Y no podia despedirme de este mundo sénior sin pensar y rendir homenaje a mi amigo Rafael Layola. Con él aprendí la màgia de llevar un grupo, la mágia de disfrutar de la relación con los jugadores, la mágia de la gestión. Gracias Rafa, por tu generosidad incondicional.eternamente agradecido. Un maestro y un amigo de los de verdad
Espero pues poder aportar algo de ese baloncesto a esas jugadoras del Bàsquet Vedruna Palamós y a la vez aprender de ellas.
"Siguiendo la pelota naranja"
2016/05/12
DESTINO: ESCOLA VEDRUNA PALAMÓS
Después de 30 años
entrenando senior y también formación, en la zona de Barcelona, he decidido
hacer un cambio personal y profesional en mi vida.
Es un cambio muy meditado
después de dos años de reflexión. Mi
mujer y mis hijos (que han sido jugadores y Adrià también entrenador de
Baloncesto) han estado 30 años pendientes de mi gran pasión que ha sido
entrenar. Ellos han soportado esa dedicación constante, que muchos entrenadores
saben lo que es. Mis padres que viven en Sant Antoni de Calonge y mi hermano y
mi sobrino, que viven Calonge, saben lo difícil que era para mi no estar mas a
menudo con ellos.
Para mi, no subir a mi
tierra de l’Empordà, siempre me ha supuesto un enfrentamiento conmigo
mismo...Querer subir pero tener partidos, o hacer scoutings, o trabajar.
Y creo que ha llegado el
momento de cambiar esa contradicción constante. No quería dejar mi gran pasión
de entrenar, pero tampoco quería renunciar a subir a Palamós. En este proceso
Jordi Acero, (responsable del àrea deportiva de Baloncesto de l’Escola Vedruna
de Palamós) se cruzó en mi camino, y ya el año pasado estuve apunto de dar ese
paso. Este año me ha ofrecido llevar dos equipos de formación: el pre-infantil
femenino i el cadete femenino. Siempre le estaré agradecido, y por otra parte es
la consecuencia de haber conocido grandes jugadores y grandes personas como el,
a lo largo de mi trayectoria deportiva
Así pues, aprovechando que
este año he tenido una grandísima experiencia con el cadete femenino del Grup Barna,
con el que no solo he disfrutado como entrenador, sino que he aprendido mucho
de ellas, decidí dar este paso para la temporada siguiente.
Va a suponer una inversión
de tiempo y también en el desplazamiento, pero como os he dicho antes Teresa,
mi mujer, ha sido decisiva en esta decisión y hemos pactado venir los dos
juntos el fin de semana a disfrutar de entrenar baloncesto, a disfrutar de
estar juntos al lado de nuestro mar, y a disfrutar de tener la familia mas
cerca. Las tres cosas que mas quiero en este mundo junto con mis hijos, evidentemente en diferente orden.
Mi cambio a Girona supone
contagiar mi gran pasión a las jugadoras, que aprendan y me expriman todo lo que llevo dentro
como entrenador y supone también, emplear toda mi experiencia con el objetivo que las
chicas del Pre-Infantil y cadete de l’Escola Vedruna, puedan tener un mejor
nivel deportivo, y paralelamente proyectar mi idea de que el baloncesto es mas
que un balón, más que una canasta, y que la vivencia de estar en un equipo, es
para mi una formación necesaria en su desarrollo y evolución personal.
Los cambios reportan
efectos positivos, por que te obligan a reinventarte, a situarte en un entorno
diferente, a adaptarte también a una realidad distinta. Pero no me asusta. Lo
hago con ilusión, mucha ilusión, como todos los proyectos que empiezo, por que
en todos me he dejado el alma y este no será una excepción.
Si..Destino Vedruna
Palamós, sin olvidar de donde vengo, sin olvidar que el pasado me ha dado todo
lo que espero de este presente inmediato.
2016/04/11
2016/03/14
LA IMPORTANCIA DEL PSICÓLOGO DEPORTIVO
“Muchas personas creen que
no son buenas ejerciendo su especialidad. Se engañan. Son buenísimas. Solo
necesitan aprender a tolerar la presión” (Pep Marí)
Hace dos años cunado estuve ayudando en
la concentración de la preselección catalana infantil masculina, tuve la
oportunidad de valorar hasta que punto la presión puede afectar en el
rendimiento de un jugador. Jugadores que juegan en buenos equipos, que tienen
buenos entrenadores se bloquean ante situaciones determinadas. Y digo esto por
que recuerdo que los entrenadores de la selección Ferran Peña y Jacob Raurell,
me contaban que jugadores muy buenos técnicamente, se ponían la camiseta de la
selección, y ante esta responsabilidad, eran incapaces de desarrollar sus argumentos como jugadores escogido, entre muchos, para ser seleccionados.
Como dice Pep Marí, no es
que sean malos jugadores o entrenadores,
son buenísimos, pero no saben tolerar esa presión que lleva consigo una
determinada responsabilidad. No han aprendido. Si nos fijamos hay grandes
deportistas que cuando compiten en ligas menores o torneos determinados, son
capaces de sacar todo su rendimiento, pero en la medida que son expuestos a una
situación de presión que comporte gran responsabilidad individual, no son
capaces de mostrar todos sus cualidades técnicas. En cambio a otros jugadores
esta misma presión les favorece y les motiva de tal manera que son capaces de brillar.
En las etapas de formación
deberíamos los entrenadores, y personas externas con influencia en el
deportista, a ver en el juego un divertimiento en si mismo. Pero claro, el juego en si mismo también es capaz de
generar respuestas negativas en cada uno y de diferente manera. La
autoexigencia, la auto responsabilidad puede generar un exceso de ansiedad. Es
evidente que puede haber factores genéticos, pero si estos se combinan con los
ambientales i familiares veremos que causa efectos muy negativos sobre el
deportista. Frases como: “No puedo defraudar al entrenador”, “Mi padre fue jugador
reconocido y quiero llegar a ser como él”. “Me obsesiono con ganar”, “Si no
hago canastas, mi padre dice que no se ve la labor como jugador”,y muchas mas
frases que habremos oído que condicionan al deportista, que ejercen una
presión.
Desde mi punto de vista, el
deporte el desarrollo competitivo en el deporte, exige por parte de los
entrenadores un tipo de entrenamiento invisible mas allá del técnico-táctico.
El entrenamiento mental. ¿Qué quiere decir eso?, Que los entrenadores debemos
estar preparados para ejercer una gestión del individuo y del grupo que supone
trabajar psicológicamente con los jugadores. Y pienso que muchos no están
preparados para ejercer este tipo de entrenamiento mental, que ahora si, es
evidente que es imprescindible, para no sólo unos buenos resultados deportivos,
sino por el bienestar del jugador/a.
No nos damos cuenta de la
gran influencia que tenemos con los deportistas en nuestros entrenamientos, y
el no saber distinguir ítems que nos están dando una información de que algo esta
sucediendo con este jugador y/o con este grupo.
Hubo una época en que había
solo entrenadores específicos del juego, después se incorporaron los
Preparadores físicos, por que vimos que necesitábamos específicamente un
profesional para poder complementar y adaptar los entrenamientos técnicos con
el estado físico del jugador.
Bien, creo que ahora los
clubs tiene que hacer un paso adelante y contratar un profesional de psicología
que oriente a los entrenadores a
trabajar sesiones también mentalmente, adecuándolas a las etapas de
competición, a los objetivos individuales y colectivos y a saber percibir e
identificar situaciones de vulnerabilidad mental, que pueda sufrir el jugador/a
o el grupo.
Las situaciones de estrés,
las situaciones de presión, de angustia, etc...que se viven en el equipo, no
pueden tratarse con un “vamos, anímate”. Lo siento pero eso no funciona así.
Las pautas de un profesional especializado son básicas para no torpedear la
sensibilidad del jugador y abordar la problemática con coherencia. De no ser
así, el jugador traspasara esa angustia
y esa presión a sus distintos hábitos como los estudios o los relacionales.
Se del escepticismo en
incorporar psicólogos deportivos cuando vemos que mayoritariamente equipos
profesionales, no tienen esa figura en sus staff técnico, y cuesta creer que no
sea así, pero me aventuro a decir que de aquí a un tiempo veremos como esta
tendencia cambia, por que el deporte cada vez el aspecto mental, tiene una
mayor influencia en el rendimiento del jugador. Los entrenadores ya no
mandamos, ni dirigimos...gestionamos, y eso implica muchas facetas diferentes, que han de ser realizadas por otros profesionales.
2016/02/08
ESTAN EN EL GRUPO DE ARRIBA
Han
sido cuatro meses de trabajo, y como les pasa a todos los equipos y
entrenadores, durante los meses de competición se suman inconvenientes,
contratiempos que hay que ir superando a medida que van saliendo. En eso no
hemos sido distintos a nadie. Hemos contado eso si, con una inestimable ayuda
de todas las jugadoras del B y su entrenador, para compensar las bajas y las
lesiones.
Estoy
satisfecho, por que muchas de estas jugadoras, por motivos laborales, de
proyectos personales, etc, dejaran de ser jugadoras de baloncesto el año
próximo y merecían despedirse de este deporte con una satisfacción.
Sigo
pensando que los entrenadores trabajamos para eso, a ayudar a cumplir los
sueños de los jugadores/as. Ayudarlas en los procesos de transformación
deportivas, a trabajar en equipo, a poner su individualidad al servicio del
grupo y a ayudarlas a superar los momentos difíciles.
Pero
nosotros los entrenadores a veces perdemos eso de vista y seguimos dando mas importancia
a los movimientos tácticos, a los movimientos pautados. Necesitamos sentirnos
seguros, y nos pensamos que con eso lo conseguiremos.
Cuando
perdemos nos lo cuestionamos todo y cuando ganamos también por que somos
insaciables con nosotros mismos. Y en verdad, ganar o perder, es parte de este
juego. Aquí no hay empates. Si pierdes y tienes un grupo unido superaras las
adversidades, si ganas y el grupo no ha reaccionado como tal, tendrás el
resultado como aval, pero en tu parte más íntima sabrás de tu fracaso
como gestor . Aún así hay entrenadores que prefieren ganar, sabiendo que no
tienen al grupo, por que esos entrenadores tan sólo les mueve su ego. No quiero
perder, pero prefiero eso a perder un grupo y ganar un resultado.
la
ostia es cuando ganas y encima has sido capaz de construir un gran grupo de trabajo. Ahi consigues
(como dicen Xavi García y Ricard Casas) "La exceléncia" como entrenador.
"Siguiendo a la pelota naranja, trabajando para llegar a la exceléncia".
2016/02/05
FERRAN PEÑA Y JACOB RAURELL
Hoy me he enterado de que Ferran Peña y
Jacob Raurell, ya no serán seleccionadores infantiles de Catalunya. Ferràn
después de 10 años y Jacob después de 6 años, ejerciendo este cargo.
A Ferrán lo conozco hace muchos años
del mundo del baloncesto, y particularmente lo recuerdo entrenando al San Josep
i al Vic, (entre otros) enfrentándonos y consiguiendo que ahora mismo no
recuerde ni un solo resultado deportivo y si nuestra amistad y respeto como
entrenadores.
Jacob fue mi ayudante en el UE Mataró
cuando conseguimos ser campeones del Grupo EBA C, ahora hace 6 años. Tanto él
como su mujer Esther (que también era ayudante), me dieron una lección de cómo
deben ser dos ayudantes, de esa capacidad de comprensión y sentirte arropado en
todo momento.
He tenido el gran privilegio de conocerlos,
y he tenido la gran suerte de que me llamaran para que les ayudase en la
preselección infantil ahora hará tres años. Los he visto trabajando, los he
visto relacionándose con los jugadores, los he oído dando esos consejos
impagables a las jóvenes promesas. Les he visto sufrir dando la lista
definitiva de los elegidos. Les he visto emocionarse con su trabajo como
entrenadores.
Si algunos jugadores leen esto ahora,
sabrán de que estoy hablando y seguro que recordaran las sesiones de
entrenamiento como algo mas que un aprendizaje técnico o táctico. Sabrán
entender que detrás de estas lecciones de baloncesto que han recibido, había
algo mas importante. Enseñar como enfrentarse a las dificultades, como
afrontarlas y como superarlas. Y no solo desde una vertiente deportiva, sino
humana. Han sido capaces de exigir y a la vez comprender. Han sido capaces de
elegir y al mismo tiempo respetar. Han sido capaces de equilibrar a un grupo, por encima incluso de su visión individual,
por el bien de la selección infantil catalana.
Una de las cosas que me impacto cuando
estuve con ellos, es la capacidad que tienen para positivar a cualquier
jugador, de ver sus puntos fuertes y trabajar los débiles des de el refuerzo
positivo, desde el respeto al jugador por lo que es.
Han guardado las medallas y han dado la
espalda al divismo del que algunos presumen, han decidido mostrarse tal como
son, personas del baloncesto,
profesionales entregados a una pasión. La pasión de entrenar!!!!
Algunos de esos jugadores que han
pasado por sus manos, si llegan a la élite como jugadores, sabrán reconocer
estos consejos y a los que no llegaran sabrán valorar la gran oportunidad que
tuvieron de ser unos privilegiados por tenerlos como entrenadores.
Desde este pequeño espacio, mi total reconocimiento
Un aplauso a ti Ferran y a ti Jacob
2016/01/18
CUANDO VIENE LA TORMENTA
Cuando las cosas no funcionan, no soy de los que se esconden. En
mis redes sociales expongo los buenos y los malos momentos, por que la vida
es eso. No se entiende una cosa sin la
otra, el ying y el yang, donde todo esta en movimiento constante, y donde el
negro no es tan negro ni el blanco tan blanco.
Los entrenadores prevemos las tormentas. Los nubarrones con lluvia, el
viento y el frío que se aproxima, los intuyes,
aunque la naturaleza se impone y nunca puedes saber el alcance que
tendrá en tu equipo y su repercusión.
Algunos amigos me llaman para darme
ánimos y lo agradezco infinitamente, aunque los que entrenamos sabemos que las
soluciones pasan básicamente por lo que tu puedes controlar, que es muy poco o
mucho según se mire. Es cierto que en 29 años entrenando no había experimentado
una situación similar. Y no estoy hablando de las crisis que muchos equipos
tienen durante la temporada y que forman parte del camino que ha de recorrer un grupo diez meses. Estoy hablando de un conjunto de situaciones negativas en
forma de lesiones, bajas etc. que se instalan como un nubarrón negro encima de
tu equipo. Así es que te empiezas mojando, y
acabas empapado y sin nada para secarte, teniendo la percepción de estar
instalado ahí, dando vueltas como una peonza, en un vaivén de sensaciones del
que no consigues salir.
Así es que he pensado en mi amigo
“Joan”, un delegado que tuve y al que
me une una buena amistad.
Joan, que tenia una empresa grande, me
contaba que de tener a muchos trabajadores en su empresa, paso a no tener
ninguno y estar arruinado. Se quedo a “0”. Peor aún. Con deudas. Cuando le
pregunte como había salido de esta situación me dio una explicación, que
entendí que es tener fe, que es sacar energía de donde no la hay. Me decía que
un día llego a su empresa. Todo estaba desmantelado, no había ni una máquina,
todo era un solar. Tan solo había un teléfono, unos cartones y alguna que otra
herramienta. Imaginaros esta situación. Le pregunté que hizo al ver esta imagen.
El me contesto: “Joan cuando estaba ahí en la empresa sonó el teléfono. Era una
señora que quería que le arreglase una persiana, así que yo le dije que ahora
mismo iba. Me hice una caja de con unos cartones, le puse dentro cuatro
herramientas que quedaban por el solar (y cuatro era en sentido literal) y fui
a arreglar la persiana de esa señora. Y seguí recuperándome hasta hoy”. Sólo la imagen ya hace daño cuando la trasladas a la realidad.
Pensando en él, he visto que no todo
depende de ti, pero lo que tu puedes hacer, lo que tu puedes aportar, lo que tu
puedes controlar, debes hacerlo, debes intentarlo, debes vaciarte hasta el
final.
No puedes pedirle a alguien que haga su
trabajo, o si puedes, pero la responsabilidad individual es de cada uno, puedes
exigir trabajo, motivación y todo lo que tu creas, pero al final es la persona,
el individuo como tal que debe ser conciente de que puede aportar ella, no solo
para el grupo, sino por valor personal, por dignidad, por autoestima...Lo otro
viene después.
Perder partidos no es una tragedia. No
clasificarse no es una tragedia. Jugar mal no es una tragedia. Al fin y al cabo la competición deportiva si
que no es previsible. Uno debe disfrutar del camino, encontrar motivación para
el entrenamiento diario, la mejora constante. Si encuentras placer en eso, lo
demás tiene una importancia relativa.
Hay que buscar el placer en lo que
haces, y no hacer algo para tener placer.
La tormenta ha llegado y parece que se
ha instalado unos días., habrá que bailar con ella hasta que encuentre otra
pareja.
Como
dice mi hermano: El secreto de la serenidad es cooperar
incondicionalmente con lo inevitable.
LA ASIGNATURA DE DIRECCIÓN DE GRUPO
Hace 18 años que imparto cursos
de entrenador. Debo un agradecimiento especial a Richi Serres, que ante la
imposibilidad de que Juan C.Pie pudiera dar una asignatura, me ofreció hacerlo
a mi.
Desde entonces y hasta
ahora he disfrutado y sigo disfrutando de esta parte pedagógica donde el
concepto de enseñar es aprender, y tanto Alberto Horno primero como Joan Cortés
después, me han seguido dando la confianza y la oportunidad de impartir las
asignaturas de sistemas de juego,
dirección de grupo y dirección de partido principalmente. Curiosamente la
asignatura de sistemas de juego tiene el doble de horas por ejemplo que el de
dirección de grupo.
Hace años cuando impartía
sistemas de ataque y defensa, era y es una asignatura de mucho peso entre los
que aspiran a sacarse el titulo de entrenador. Disfruto mucho con ella y los
alumnos que he tenido me recuerdan siempre mi especial predilección por el sistema Flex, y todo el abanico de posibilidades
que da al entrenador un sistema de juego tan rico en conceptos, como complejo a
la vez.. Lo considero como parte importante de la formación del entrenador y
donde yo aprendí tanto del maestro Ricard Casas.
Pero realmente a medida que
han pasado los años, me he ido formando mas a nivel personal , sobre la gestión
de un equipo y todo lo que conlleva la responsabilidad de ser entrenador de un
grupo de jugadores o jugadoras. Por lo tanto la asignatura Dirección de grupo
que para mi es una asignatura que me produce mucho placer impartir. Dicho esto, creo sinceramente, que habría que
cambiar el nombre a esta asignatura. Cuando hace tantos años empecé a dar
clases, muchos entrenadores no sabían que quería decir eso de Dirección de
Grupo, de hecho, algunos básicamente les interesaba los sistemas, y otras mas
específicas, donde el balón estaba “en juego”.
Cuando empecé a introducir,
el “role playing” en las clases y observaba a los entrenadores en escena frente
a situaciones improvisadas, me di cuenta en seguida que esta asignatura tenia
algo que no daban las demás. Allí veía
muy fácilmente, como algunos entrenadores tendrían la capacidad de
gestionar grupos de trabajo, más allá evidentemente de sus capacidades
técnicas.
Así que, debido a mi
profesión diaria y a la formación a la que yo asistía como alumno de técnicas
de Gestalt, he ido adaptando los contenidos con la realidad del baloncesto de
ahora. Una realidad donde tiene muchísima importancia la gestión del grupo, la
gestión de sus emociones, y el trabajo diario que hay que realizar respecto a
aspectos que florecen de esta intervención emocional
Es por ello que creo que
esta signatura y des de mi punto de vista, debería cambiar de nombre y de horas
de formación. Estamos ante un momento especialmente importante para modificar
esa formación del técnico. El entrenador ya no es solo un transmisor táctico-técnico. El entrenador
necesita de herramientas emocionales para hacer funcionar esos aspectos
técnicos y tácticos. Siempre las ha necesitado, pero también es cierto que ha
cambiado mucho la relación entrenador-jugador. Para el entrenador ya no basta
con saber mucho de sistemas de juego. Eso debe ir acompañado de “otra pata” que
le aporte al entrenador una visión diferente y complementaria de cómo puede
realizar su trabajo en un sentido mas completo y mas amplio.
La visión ha cambiado, es
cierto, y ahora muchos entrenadores tienen una formación académica exhaustiva,
con muchísima información (quizás demasiada?) necesaria para desarrollar su
pasión que es la de entrenar. Pero si queremos avanzar, lograr “la maestria”
(Como dicen Xavi Garcia y R Casas),
hemos de seguir avanzando sobre el concepto de gestión de grupo, mas que
dirección de grupo.
Para mi las emociones no se
dirigen, se gestionan. Y gestionarlas es muchísimo mas difícil que dirigirlas.
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