"Si dejas de aprender, dejas de enseñar" (Joan González)

2016/06/28

EL SINDROME POST-TEMPORADA DEL ENTRENADOR







Cuando un entrenador acaba una temporada, a pesar del cansancio acumulado tanto físicamente como psicológicamente, le invade una sensación de vacío.

Ha estado nueve meses acostumbrado a unas rutinas de trabajo, a unos horarios, pero sobretodo a lo que conlleva trabajar con un grupo humano de jugadoras.

Esta sensación tiene mas síntomas que se traducen en:


-         Idealización de todos los momentos positivos.


Con el tiempo, muchas de las imágenes que tu tienes retenidas en tu disco duro como satisfactorias, tienden a coger mas relevancia y emergen potentes como parte de una etapa que disfrutaste y que no volverá a suceder. Momentos de partidos importantes, de relaciones de grupo, de conversaciones con jugadoras, momentos de alegría...Todo esto se entremezcla y interfiere en tu análisis objetivo de la valoración de la temporada. Al pensar en todas esas imágenes juntas, tu mente proyecta una película vivida pero irreal. Es atemporal. Cruza todos los momentos “màgicos” y te hace idealizar algunas situaciones.


-         Relativización de los momentos negativos.


A esto se suma la capacidad que tenemos algunas personas en difuminar realmente los momentos agrios, los momentos en que hemos sufrido por diferentes motivos: En la gestión del vestuario, en alguna fases de la temporada con los entrenamientos, En las relaciones con el club o personas  de este club. Por que no hemos de olvidar que los clubs son dirigidos por persones y a veces generalizamos y nombramos al club como parte de un problema cuando no es asi.



-         Sensación de perdida de amistades realizadas en este periodo de trabajo


Cuando te vas de un club, no puedes pasar por alto que has hecho unos lazos con distinta gente. Estas relaciones que has ido tejiendo durante la temporada, que han sido intensas, de pronto cuando dejas el club, se establecen como unas jerarquías: Unas se dejan ir, otras tendrás una relación puntual, y con alguna otra seguramente formara parte de tu circulo mas cercano de amistades. Es esa “mochila” virtual, fruto de bagaje que se va llenando también de esas personas que te acompañan en tu viaje vital.



-         Descolocación ante cambio de rutina diaria y de fines de semana...


Entrenas a otro club. Cambian las imágenes. Las instalaciones son nuevas, los  jugadores son distintos, tus referencias ya no son las mismas, es decir cambian tus rutinas. Para algunos entrenadores en los que me incluyo, donde las pautas y rutinas son importantes, encuentras a faltar incluso el café que te tomabas antes de entrenar por ejemplo. Esta simple rutina, pero que has estado haciendo todo el año, marca tu forma de desenvolverte. Por que formaba parte de tu ritual diario.


Todas estas sensaciones son más o menos duraderas en función de la personalidad de cada entrenador, en la adaptación  a un nuevo grupo, equipo de trabajo y  club si el cambio también conlleva a eso.



Estas sensaciones se acentúan con el cambio de club, por que realmente dejas un aparte de tu trayectoria como entrenador y además tu te llevas parte de esta historia contigo, por que te has sentido como parte del proceso vital de la  entidad. Al final, con los años, tu habrás formado, en mayor o menor medida, parte de este proceso deportivo de desarrollo del juego del baloncesto en este club y con ello también siempre dejas una parte de ti.



Cuando empiezas a entrenar no tienes tanto estas sensaciones, por que la mayoría de entrenadores, hacen los cambios pensando mayoritariamente en una ascensión deportiva, en una mejora de categoría, en buscar su proceso como entrenadores, y por que no decirlo, con la ilusión de llegar a lo más alto como entrenador, aspecto que por otra parte, me parece de lo mas lícito. Así pues los cambios responden mas a mejoras profesionales.

En el caso de entrenadores que ya llevamos muchos años entrenando, los cambios se producen mas desde la vertiente emocional. Valoras aspectos menos tangibles, pero mas importantes. ¿Dónde te sentirás mejor?. ¿Cómo será tu día a día?. ¿Que club vas a encontrar?, ¿Qué organización vas a tener? ¿Cómo serán tus rutinas?.

Para mi lo más importante es el día a día de entrenamientos. Lo que vives en ellos, el “antes” y el “después”. Todos los entrenadores tienen algún síntoma post-temporada, por que todos los entrenadores que conozco, sin excepción, dejan algo suyo en todos los equipos que entrenan.



Ahora toca pensar en la otra imagen. Vamos empezando...Coger el silbato, y entrar en cancha a buscar nuevos retos, que te traerán nuevos recuerdos.



Vamos sumando...