"Si dejas de aprender, dejas de enseñar" (Joan González)

2015/03/11

LOS JUGADORES QUE SON ENTRENADORES, LOS ENTRENADORES QUE SON JUGADORES

Son muchos los jugadores que les gusta hacer de entrenador en equipos de formación  y algunos  entrenadores que también tienen  la faceta de jugador..parece lo mismo, pero desde mi punto de vista no lo es..

Los entrenadores que también dedican parte de su tiempo a hacer de jugadores, creo que hasta cierto punto son capaces de mejorar  como jugadores, en concepción de espacios, en la lectura de situaciones, etc. Esto les hace ser mas críticos con sus compañeros. Ven el juego de manera diferente, porque están aplicando una visión de entrenador al juego de su equipo, aunque a veces olvidan que este equipo ya tiene su entrenador. Ellos, tal vez, harían las cosas diferentes si fueran el entrenador, pero les digo que su visión es desde dentro del campo, y normalmente, cuando retrasas la vista hacia atrás, coges perspectiva y ángulo de visión, y eso modifica tu manera de ver el partido, y condiciona también tu dirección de partido.

No es una situación fácil y es complicado encontrar el equilibrio entre una faceta y otra...Deben cambiar de “chip” y situarse en el plano que les corresponde, porque sino,  hay el peligro de no hacer bien ni una cosa ni la otra, o que entren en conflicto, entre lo que piensas como entrenador y lo que tienes que hacer como jugador.

Para mi es diferente cuando un jugador hace de entrenador. Yo creo que ahí tiene una cierta  ventaja, respecto a entrenadores que no han sido jugadores. En un momento determinado puede entender las reacciones o situaciones que pasan dentro del parquet. Yo creo que ahí si que puede aplicar su experiencia como jugador, aunque eso si, manteniendo su criterio como entrenador. Muchos jugadores que se han hecho entrenador nos han enseñado como han aplicado sus conocimientos (y no sólo en el baloncesto) en beneficio del equipo.

Pero, esta doble faceta, ¿Hasta cuando es posible? Yo creo que hay un momento que uno tiene que  decidir que es lo que le gusta hacer y donde puede aportar mas. No en todos los casos el hecho de ser entrenador serás mejor jugador, ni siendo jugador serás mejor entrenador.

En mi caso cuando jugué en Junior preferente de La Salle Bonanova (que tenia equipo en primera división con Atienza, Blanco, etc) en 1979, había jugadores como Freixenet, Collins, Dosaula, Puig, Sala, etc...Yo no jugaba y no sin razón. No tenia la categoría para jugar en este equipo. Pero las circunstancias llevaron a que me ficharan sin apenas poder aportar nada. Mis largos minutos de banquillo, ese tan duro cuando sabes que no juegas, me llevó a seguir el juego des de un punto de vista diferente. En el 90% de los partidos ya sabia que no jugaría, y opté por no revelarme ante esta situación y quise entender el juego tal como lo hacia mi entrenador Miquel Ametlla, gran entrenador. Y claro al final cuando tu línea de visión converge con la del   entrenador, te das cuenta de porque no juegas.

Así hice dos cosas. Trabajé al máximo por mi compromiso como jugador, y desarrollé la capacidad de intuir lo que pasaba en un partido, a base de observación con distancia, como yo lo llamo.

Nunca un banquillo tan duro como el que teníamos, ni la frialdad de mis compañeros ante mi situación, pensé que seria el comienzo de lo que mas me gusta hacer, que es entrenar.

Pero antes he dicho que había que mantener un equilibrio, y siendo honesto con vosotros, os diré que me dejó secuelas. Me propuse trabajar los equipos en un contexto de grupo de trabajo sin excluir a nadie. Nunca he permitido que un jugador de categoría inferior, que entrene en mi equipo, sea tratado diferente. Nunca he permitido que el que no juega o sea mas joven, llevé el agua, o recoja los balones, y nunca he permitido que los compañeros se rieran de una situación de no juego de otro jugador, como a mi me pasó, con el beneplácito del entrenador.

Ser jugador te ha de servir para que  si eres entrenador, saber que quieres hacer, pero sobre todo, como quieres que no sea tu equipo.


Aplica como jugador a tu ser entrenador, y apórtate como entrenador tu experiencia como jugador.