"Si dejas de aprender, dejas de enseñar" (Joan González)

2014/01/03

LA RUMOROLOGIA...UNA FORMA DE ETIQUETAR


La gran complejidad de las situaciones nos obligan a simplificar mentalmente agrupando y etiquetando la información para poder manejarlas con mas facilidad. El problema surge cuando hacemos un paso mas y etiquetamos a las personas.

En baloncesto como en otros ámbitos de la vida, etiquetar se produce diariamente. Solemos etiquetar en función de algún defecto del jugador o del entrenador...Inmediatamente generalizamos este error y lo divulgamos alegremente hasta crear una corriente adversa, que define a esta persona por esta etiqueta.

Entrenadores: Podéis decirme entrenando, la cantidad de etiquetas que os habéis encontrado?? “Este/a jugador es muy vago...” “Este/a no entiende nada” “Cuidado con aquel entrenador que tiene mucho genio”... y así podríais hacer una larga lista de personas etiquetadas, y que agruparemos convenientemente en nuestro cerebro a fin de discriminar a las diferentes personas....

La etiqueta va muy relacionada con el rumor. Se utiliza para definir a alguien , pero básicamente sobre un aspecto negativo.
Fijaros...”Este entrenador hace unas cosas muy raras,  es muy suyo, nunca sabes por donde te va a salir, etc...” Este rumor hacia este entrenador o del jugador, se extiende como una mancha de aceite y no tiene fin. Generalmente este entrenador le llega este tipo de etiqueta que se ha difundido a través de un rumor. La conclusión es que esta persona ante la inviabilidad de luchar contra este rumor, acaba por ejercer como la etiqueta que le han “colgado”.

Atentos con estos rumores que enjuician a una persona y la pueden etiquetar...y ésta dura siempre. Los mas maduros la llevan a la espalda y no les importa, porque se sienten valorados por la gente que les rodea y les quiere, pero otros, que posiblemente no tengan esta autoestima en su nivel de equilibrio, les genera tal ansiedad y malestar que pueden llegar a destruirse por dentro.

En nuestro ámbito es fácil hacer daño a los entrenadores y también a los jugadores....Sueltan un rumor, se extiende y la gente que no te conoce acaba pensando esto de ti aún sin conocerte, otros ya se han encargado de colgarte una etiqueta. Será tu carta de presentación invisible. Esa que llevas en la frente y que sólo “ven” los demás

Es fácil decir que lo mejor es no escuchar a nadie, pero la realidad es que algunas personas necesitan dar rumores para ser escuchados. Son estas personas que les molesta la competencia, que se sienten inseguros de su cargo, que sospechan de todo lo nuevo, y que se aferran a la silla por que tienen miedo a perderla, o a perder estos pocos euros que para ellos son mas valiosos que la honestidad. 

Alejaros de los rumores, huíd de las etiquetas, y desconfiad de la gente que las difunde, por que de vosotros él/ella ya lo habrá hecho...Es su puesta en escena. Es su mal forma de vivir, pero necesaria para subsistir, ante su vacío mundo  sin color.