He leído muchas críticas,
hacia los entrenadores jóvenes que no
comparto. Muchos de ellos tienen ilusión, formación y pasión por este deporte
del baloncesto. Muchos se preparan y son buenos entrenadores de formación.
Son grandes avanzados, en
las nuevas tecnologías aplicadas al baloncesto y tienen un gran acceso mediante
las redes sociales, a una interacción con sus jugadores y con el club al que
prestan sus servicios como entrenadores.
Hablando con un entrenador
de bastante edad y que se dedica a la formación de entrenadores en USA, me
decía que en una de sus visitas a España, encontraba que aun con pocos medios
(nosotros no tenemos sus canchas de baloncesto, ni sus infraestructuras
deportivas), veía a los entrenadores de aquí con una buena formación de
baloncesto, pero que en cambio veía déficits en lo que se refiere a las formas,
en los entrenadores.
Él se refería, a que aquí no le damos importancia a aspectos de
educación deportiva y que hemos olvidado, en su aplicación, también a los
jugadores, obviando que no sólo somos formadores de baloncesto sino que también
educadores deportivos.
Eso me ha hecho
reflexionar, cuando yo siempre “he obligado” a mis jugadores a saludar al
entrenador, antes de una sesión de
entrenamiento. Muchos de ellos han mostrado su sorpresa, y durante algunos
entrenos he notado falta de habito hasta acostumbrarse a una rutina, que para
mí adquiere mucha importancia. El saludo formal no es sólo un acto rutinario,
para mí es un: “hola que tal, como ha ido el día, que tal los estudios, la
familia, etc... bienvenido a la sesión de entrenamiento”. Sólo con ver como te dan la mano, como te miran, como
responden, intuyes como se encuentra el
jugador, su estado de ánimo, su predisposición, etc., y son unos segundos donde
tu entrenamiento individual ya ha empezado. Puedo decir que con el tiempo
consigo saber como está el jugador en función de este saludo. Pero más allá de
la información que te da el jugador, para mí es un momento educacional
importante. Ves a una persona y le saludas. ¿¿Cuantas veces un niño,
conoce a alguien y no es ni capaz de
saludar??
Este entrenador me decía, que para ellos las formas son muy importantes. Si, ya sé que hay cosas que no
nos gustan de la mentalidad americana, pero a mi personalmente esto me seduce
mucho. El respeto que el jugador tiene a su entrenador, dentro y fuera de la
cancha. El entrenador es considerado como una persona importante en el proceso
educativo, de formación global. Pero esto a aparte de la mentalidad, también lo
hemos de ganar nosotros. Ser capaces de formar en las formas. Y en eso
entrenadores veo muy poca formación.
En el colectivo de
entrenadores he visto algunas veces como son incapaces de
saludarse y hablar entre ellos de como les va la temporada. Como pretendemos
que nuestros jugadores hagan lo mismo, si lo que ven en sus formadores, es una
relación fría, distante, y a veces incluso enemiga.
Los clubes deben apostar
por una nueva estrategia, que vaya más allá de la victoria deportiva. Deben
apostar por la contratación de entrenadores que no sólo tengan conocimientos de
baloncesto.
Los entrenadores han de ser
referentes deportivos y educacionales. Los jugadores tienen que recordar al
club donde han hecho deporte, no sólo por los logros deportivos, si los ha
habido, sino por como han sido capaces de influirles en su apuesta de futuro
integral. La vida no es ganar o perder. La vida es luchar, ser solidario,
humilde, generoso, respetar y ser tolerante
con los demás, saber afrontar las frustraciones y los momentos
difíciles, gestionar los éxitos. Trabajar en grupo para un objetivo común, etc.
Me pueden decir, ¿cuales de
estos aspectos no están presentes en nuestro día a día de un entrenamiento o
partido?
Los aspectos, de las formas
y sus contenidos, en la educación, en las prendas de vestir adecuadas, en
nuestra interacción con directivos, padres, etc., deben ser normas para
nosotros.
Nuestra imagen global es fundamental en la interiorización de la
formación de los jugadores. Ellos vienen a aprender a jugar a baloncesto,
cierto. Pero nuestro objetivo ha de ser... Formar jugadores, para formar
personas, para formar en actitudes, para formar en valores.
Si no, me pueden decir
entrenadores, que sentido tiene entrenar???
Brillante!!!
ResponEliminaGRAN VERITAT HO HE COMPARTIT AL MEU MUR GRACIES PER APENDREN TOTS PLEGATS D`AQUEST MAGNIFIC BRILLANT I EXCELENT POST
ResponEliminaMoltes gràcies Manel i Lourdes per la vostre opinió.
ResponEliminaMolta raó. Comprateixo al mur del SAN
ResponEliminaMolt bon escrit.
ResponEliminaGràcies Ramón i Xavier
ResponEliminaUna gran veritat. Encara em sento orgullós, del tracte que tinc encara amb aquells jugadors que entrenava fa 20 anys, això es mantindrà per sempre.
ResponEliminacompletamente de acuerdo
ResponEliminaCuando estaba colaborando con el Mataró de Futbol, hace años, vinieron unos técnicos del Barça ( entre ellos Benages, quien fue cuidador personal de Andres Iniesta ) y otros entrenadores y colaboradores. Esta actitud de respeto que tu dices, Joan ya la ví entonces en aquella época. Los jugadores cuando salían al campo a entrenar estaban obligados a dar la mano tanto a sus entrenadaores como al Coordinador general que era el mismo Benages.
ResponEliminaEn aquella época me impresionó y creo que estaría muy bien aplicarlo a todos los clubes, empezando por los coordinadores de todos los clubes y siguiendo por los entrenadores y segundos entrenadores.